Siempre habrá un lugar donde encontrar el destino, una palabra clave para sobrevivir en este mundo salvaje. No siempre las matemáticas concuerdan y yo siempre termino hablando de lo mismo, la infinidad del infinito. Con el tiempo entendés que si le sumas a la resta un multiplicación de dividendos te volvés extraño y empezás a extrañar de forma ilimitada tendiendo al límite infinito tu propia voluntad. El primer paso para ser un inútil es intentar serlo, después uno se puede perfeccionar y convertirse en un completo inútil o en un perfecto inútil pero todo lleva su tiempo. Es complicado entender la inutilidad de ciertas cosas, es muy útil comprender la inutilidad del tiempo porque el puto es infinito, si infinito para él, nosotros tenemos un inútil pero seguro lugar. Todo en esta vida tiene su manual, todo tiene su forma específica, nadie puede tener un título sin antes practicar horas y horas, o al menos haberlo leído en Taringa, ¿Sabés cuánta cindor te hace falta para tener el nivel de inutilidad qué tengo yo? ¡muchísima!
Saliendo un poco de la ironía de turno, nadie en esta mundo en este mundo puede ser un inútil, si puede ser un inútil específico, no todos sabemos lo mismo de las mismas cosas pero si creemos saber todo de todo. Siempre hay lugar para cada quien pero lo difícil es sentir que ese lugar es de uno, a veces caemos en el lugar equivocado en el momento justo, si el peor momento de todos (la soledad).
Todo el mundo está complemente equivocado y loco, y no sabe una gran verdad que yo sé, todo el mundo es completamente soberbio y no sabe una gran verdad que yo sé, todo el mundo está drogado y vomitando toda la basura del mundo pero no sabe una gran verdad que yo sé. En fin yo sólo sé que sé una gran verdad, SOY PARTE DEL MUNDO.


Nadie es un completo inútil, al menos sirve de mal ejemplo.
Lírico