A veces a lo tácito hay que hacerlo explícito para que se entienda, es fácil pensar que la otra persona sobreentiende, por tus indirectas, lo que le querés decir pero más fácil es decirlo en simple palabras. Pero cuesta, cuesta hacer lo que uno piensa no por miedo a la idea sino por miedo a no recibir respuesta, el ideal siempre está vivo pero muere cuando no llega a su destino. A veces te cansas de luchar por lo que queres, o por lo que crees que queres, pero creo que es hasta darte cuenta o animarte a darte cuenta de que en realidad es lo que querés, es lo que buscas (es lo que agitas), es todo lo que necesitas.
Y hoy la verdad me cuesta encontrarle una motivación a mis días, una motivación que va más allá de tener una familia, de tener un buen trabajo, de tener buenos amigos, de tener todo lo complejo simplemente en tus manos, a veces querés ver un poquito más. Muchas veces me veo reflejado en la boludes, en la estupideces que hago para hacer reír y en tantas otras cosas que no reflejan a mi persona en si misma sino al payaso que muestro hacia afuera para no descrubir el interior, porque al fin de cuentas vivimos dentro (por más ladrillitos vistos, pisos de marmol, etc que se vea de una casa, no es una casa si está vacía).
Ese vacío a veces quema, es como el hielo (es frío pero quema), quema porque a veces no sabés como manejarlo, como llevarlo, todo es más fácil cuando se piensa de a dos, ¿En doble sentido?, si Fla en doble sentido. Y por ese miedo que muchos conocemos y pocos asumimos podemos perder lo que nos importa, (La persona que ama puede desaparecer [o irse con otro], No la dejes volar; Solo dejala ser.), pero es difícil jugarsela, es difícil admitir lo que nos pasa, es difícil asumir errores. Tengo 3 deudas conmigo mismo, que obviamente no me animo a saldar, (quizás 4), pero el problema no es pagarlas sino el tiempo que se tarda en hacerlo.
El tiempo, si el tiempo se va, pero yo sigo acá (es obvio) INSOPORTABLEMENTE VIVO.


Yo era un hombre bueno
si hay alguien bueno en éste lugar.
Pagué todas mis deudas,
pagué mi oportunidad de amar.

Sin embargo, estoy tirado,
y nadie se acuerda de mí,
paso a través de la gente,
como el fantasma de Canterville.

Me han ofendido mucho
y nadie dio una explicación.
Ay! si pudiera matarlos,
lo haría sin ningún temor.

Pero siempre fui un tonto
que creyó en la legalidad
ahora que estoy afuera, yo sé lo que es la libertad.

Ahora que puedo amarte
yo voy a amarte de verdad,
mientras me quede aire, calor nunca te va a faltar,
y jamás volveré a fijarme en la cara de los demás.
Esa careta idiota que tira y tira para atrás.

He muerto muchas veces
acribillado en la ciudad,
pero es mejor ser muerto que un número que viene y va.

Y en mi tumba tengo discos
y cosas que no te hacen mal.
Después de muerto, nena,
vos me vendrás a visitar.