Un, dos, tres, cuatro, cinco son los espacios de sangría. Uno, emmm ¿cómo sigue? son los dedos de frente que tiene la gente. Dos cosas: una, dos. Bueno después de tantas pavadas podemos decir que el mundo se ha vuelto un kaos, un ir y venir, un viaje a lo más oscuro del universo, la maldita superficie, si la corteza de la tierra que tanto nos da está sucia. La verdad que si pero aunque esté sucia la seguimos amando porque es nuestra pacha mama, donde vamos a crecer y de donde el campesino nos dará sus cultivos para alimentar a un pueblo cagado de hambre. Igual tierra mia te seguimos queriendo, aunque estés contaminada y llena de materialistas, igual te seguimos amando aunque te maltratemos y te saquemos tus árboles. A lo que voy es que si la gente viera a la gente como a su tierra dejaríamos de ser unas malditas personas superficiales. Pero a la gente solo la ayuda la gente y mientras vivamos pensando que alguien es lindo solo por el envase, nos seguiremos equivocando el resto de nuestras vidas.

    Cinco espacios más y sale calentito del horno el segundo párrafo, el cultivo de nuestras tierras yace de lo más hondo de nuestra superficie, por que no cultivar personas a ver si sobre la tierra crecen un par de cerebros. ¡Quién te ha visto y quien te ve! (esta vez no grita un chabón frente al espejo) te crees el centro del mundo por una par de tetas y un buen culo, que la operación más barata te salió $500, pero que bien te quedó el piercieng gorda!. Volviendo, si dejáramos de comprar las cosas por el envase que tienen y nos fijáramos el contenido, quizás descubriríamos muchos aspectos internos que jamás vimos, pero mientras nos mantegamos necios en nuestra postura de el lado "bonito" de las cosas, vamos a seguir cayendo en el maldito error de terminar contaminando no sólo nuestro planeta sino también nuestras mentes.

    ¡Choque esos cinco!, sí sí se acerca el final y no podían faltar ¡una buena sangría hermano!. Por eso yo busco salir corriendo de la frivolidad, de lo arriba, de lo que está de más y busco un lugar en el cual se pueda entrar en sintonía con la verdad, la verdad de la milanga, la parte esencial. Uno no sabe a veces la clase y calidad de personas que se pierde por pensar que la vida son un par de ojos celestes. Uno no sabe lo que puede llegar a descubrir en el alma de los demás. Uno no sabe cuantas verdades puede llegar a recibir. Uno no sabe cuantas caricias sinceras puede llegar a tener. Uno nunca sabe, solo se da cuenta cuando cae que lo que vale va por dentro, que lo demás no importa, que o me salen las palabras sofisticadas que a veces quiero usar pero que en este momento me siento bien conmigo mismo por poder escribir lo que siento aunque sea en 20 simples líneas (me aspiré unas 5). Punto y aparte.

    (5 más) La diferencia entre un ser y otro, es simple, es claro (me pagan por la propagando,por que sino seria clara), es que yo lleno mi alma, yo lleno mi ser, yo levanto mi copa y adentro mio sale una llama pero al otro cuando el mundo le dejó ver lo que tenía que ver se dio cuenta que dentro de él había un vacío, ya en ese momento, casi insalvable.

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lírico irónico