Sustentando el sustentable infinito de mi mente bien lejos.

Entre tanto rostro desfigurado por la anarquía de la noche veo a la frivolidad meterse por el augurio de mi alma, mientras yo esperaba un par de lágrimas y unos abrazos que se acomoden en mi torso, descubrí que sólo hay temor y agonía. Dolor y angustía, gritos de melancolía que yacen del fondo del mar, del fondo del río, del fondo de tu alma. Buscando encontrar la razón de tu existencia te pasas los días pensando, aunque en el momento que hacés el click estás demasiado cansado o tu mente está demasiada vaga, demasiado olvidada, demasiado volada como para ir del dicho al hecho. El hecho que no va a concretarse al escribir estas líneas, la ironía que no va a volver por estos días de angustia y dolor, de años esperando un juicio justo, de que la palabra sea simplemente eso una palabra.
Que se repitan dos palabras en un párrafo no es casualidad, es causalidad, las cosas suceden porque tienen que suceder pero también pueden suceder porque nosotros queremos que sucedan pero tenemos miedos, muchos miedos. Tantos que no podemos ver hasta donde llegamos, que somos, que damos y que cagamos. La bronca de ver la televisión una hora y escuchar pura basura, puro sistema capitalista y un chabón que no sabe pronunciar la palabras Callejeros me traen a mi mente señales de bronca y bronca y tal vez un poco de bronca.
Quizás intentando estirar la agonía de este humilde texto no encuentre el título de la velada bajística. Quizás enfriando los motores y descansando mañana me salga el texto de dolor que cada 30 diciembre me mueve el alma. Quizás mañana sea un día en el cual no haya gritos, no haya dolor de cabeza, no haya gran hermano, no haya facebook, no haya blogs (bueno blogs si), no haya drogas, no haya alcohol, en fin no haya vida allá.
En el infinito del finito mundo que te corrompe podrías llegar a entender lo que significa ese pequeño pedazo de mi que perdí en un momento total de locura, los errores son compartidos, el dolor no. En esta vida no hay nada casual, nada y lo repito hasta el cansancio, y todo es blanco o negro, fumas o vendes no podés hacer las dos cosas. Entonces entendes el valor de la primera persona y no de la tercerización, porque si lo hace uno mismo es mejor.
Andate bien a la mierda.En fin sobreviviendo.


~Lírico Irónico#
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Este es el aguante